6 jul 2011
Está en la localidad de Vannes, en la Bretaña francesa, y es un magnífico ejemplo de cómo una buena concepción del interiorismo puede dar como resultado un diálogo perfecto entre la tradición (se trata de una edificación de finales del XIX) y las tendencias más modernas.
Las diferentes estancias presentan un equilibrio ejemplar de lo que decía: muebles clásicos de época junto a piezas de Ikea e iconos del diseño del XX; mobiliario de estilo rural acompañando a llamativos muebles de oficio y de inspiración industrial.
Creo que es un ejemplo muy sólido de las tendencias actuales, en las que no vemos un estilo predominante sino que el eclecticismo y el mix de estilos en sí mismo es tendencia. Prestad especial atención al salón, donde vemos un sofá del XIX junto a una hilera de butacas de cine, al comedor y sus magníficos archivadores de oficina, o a la cocina, en la que un mostrador de mercería hace las veces de isla para la preparación de los alimentos.
(Imágenes Vía Art&Décoration)
Cuántos detalles tan originales! Las butacas de cine, las persianas de cabecera... wow!
ResponderEliminarSí, es verdad Rocio, los detalles son los que hacen especial esta casa. Un verdadero ejercicio de buen estilo
ResponderEliminarEl salón y el comedor me gustan mucho, el comedor por el archivador de oficina y el resto de muebles, la pared de piedra y hasta los bonsáis; el salón, lleno de contrastes...genial!
ResponderEliminar